Restos aborígenes en Fuerteventura.
Senderistas y vecinos de Pájara (Fuerteventura) han localizado tres vasijas prehispánicas que presentaban un buen grado de conservación y que además permitirán poder hacer un estudio más minucioso de su interior para intentar averiguar si contenían restos de algún producto alimentario depositado en su momento en ellas a modo de reserva.
Según informa el Cabildo en una nota de prensa, estos restos aborígenes fueron localizados tras la erosión provocada por las recientes lluvias, mientras que el jable de la zona facilitó su conservación durante siglos, pero ahora habían quedado al descubierto.
Por su parte, una de las cerámicas contiene en su interior otra más pequeña, pero que aún no ha podido ser extraída.
Así, son vasijas de fondo plano de tipología ovoide y borde recto. Elaboradas con pasta fina y a través de una cocción reductora. Una de ellas posee una decoración en la parte superior de la panza formada por cinco líneas de incisiones paralelas entre sí que se quiebra en cinco ocasiones en forma de triángulo. El cuello la rodea dos bandas de incisiones muy finas con decoración en triángulo.
Esta primera vasija tiene 123 centímetros (cm.) de altura, un diámetro de 49 cm. y su estado de conservación es en general bueno, aunque presenta algunas fracturas que hay que restaurar. Se necesita excavar en su interior pero hay que engazarla antes de la intervención pues al vaciarla corre peligro de fracturarse por la presión que ejerce la arena de su interior.
Una segunda vasija cuenta también con decoración impresa en la parte superior de la panza formada por una banda de siete acanaladuras en forma de ondas que bordea la vasija. El cuello la rodea una línea impresa de tres incisiones en forma de triángulos. Tiene una altura de 15 cm. y un diámetro de 63 cm. Su estado de conservación es bueno y también se necesita excavar en su interior, ya que posiblemente contenga una pequeña vasija.
Mientras, la tercera vasija también muestra decoración impresa en la parte superior de la panza formada por una banda de ocho acanaladuras en forma de onda que rodea la vasija. El cuello lo rodea una decoración impresa en forma de espiga. Su estado de conservación es bueno, aunque igualmente requiere de excavar en su interior y de asegurar su conservación.
Por su parte, el consejero de Cultura y Patrimonio Histórico del Cabildo de Fuerteventura, Juan Jiménez, ha agradecido la colaboración ejemplar de los vecinos y la Policía Local de Pájara para localizar, informar y ayudar a recuperar estos nuevos restos.
Jiménez recordó que "en caso de un posible hallazgo es muy importante avisar inmediatamente a las autoridades para que los servicios de Patrimonio Histórico puedan actuar con seguridad". "Nunca debemos manipular nosotros mismos los materiales, hay que avisar para que los técnicos puedan actuar con garantías de no provocar daños", matizó.
Finalmente, aunque aún es pronto para poder hacer plantear una cronología exacta, expuso que "los especialistas indican que por las características de estas cerámicas, con toda probabilidad son de la época aborigen o bien de los primeros años después de la Conquista".
"El emplazamiento donde fueron encontradas es además muy interesante, por lo que requerirán de un estudio más detallado. Todo apunta a que son elementos de uso cotidiano para elaborar o conservar alimentos y agua", concluyó el consejero.
Según informa el Cabildo en una nota de prensa, estos restos aborígenes fueron localizados tras la erosión provocada por las recientes lluvias, mientras que el jable de la zona facilitó su conservación durante siglos, pero ahora habían quedado al descubierto.
Por su parte, una de las cerámicas contiene en su interior otra más pequeña, pero que aún no ha podido ser extraída.
Así, son vasijas de fondo plano de tipología ovoide y borde recto. Elaboradas con pasta fina y a través de una cocción reductora. Una de ellas posee una decoración en la parte superior de la panza formada por cinco líneas de incisiones paralelas entre sí que se quiebra en cinco ocasiones en forma de triángulo. El cuello la rodea dos bandas de incisiones muy finas con decoración en triángulo.
Esta primera vasija tiene 123 centímetros (cm.) de altura, un diámetro de 49 cm. y su estado de conservación es en general bueno, aunque presenta algunas fracturas que hay que restaurar. Se necesita excavar en su interior pero hay que engazarla antes de la intervención pues al vaciarla corre peligro de fracturarse por la presión que ejerce la arena de su interior.
Una segunda vasija cuenta también con decoración impresa en la parte superior de la panza formada por una banda de siete acanaladuras en forma de ondas que bordea la vasija. El cuello la rodea una línea impresa de tres incisiones en forma de triángulos. Tiene una altura de 15 cm. y un diámetro de 63 cm. Su estado de conservación es bueno y también se necesita excavar en su interior, ya que posiblemente contenga una pequeña vasija.
Mientras, la tercera vasija también muestra decoración impresa en la parte superior de la panza formada por una banda de ocho acanaladuras en forma de onda que rodea la vasija. El cuello lo rodea una decoración impresa en forma de espiga. Su estado de conservación es bueno, aunque igualmente requiere de excavar en su interior y de asegurar su conservación.
Por su parte, el consejero de Cultura y Patrimonio Histórico del Cabildo de Fuerteventura, Juan Jiménez, ha agradecido la colaboración ejemplar de los vecinos y la Policía Local de Pájara para localizar, informar y ayudar a recuperar estos nuevos restos.
Jiménez recordó que "en caso de un posible hallazgo es muy importante avisar inmediatamente a las autoridades para que los servicios de Patrimonio Histórico puedan actuar con seguridad". "Nunca debemos manipular nosotros mismos los materiales, hay que avisar para que los técnicos puedan actuar con garantías de no provocar daños", matizó.
Finalmente, aunque aún es pronto para poder hacer plantear una cronología exacta, expuso que "los especialistas indican que por las características de estas cerámicas, con toda probabilidad son de la época aborigen o bien de los primeros años después de la Conquista".
"El emplazamiento donde fueron encontradas es además muy interesante, por lo que requerirán de un estudio más detallado. Todo apunta a que son elementos de uso cotidiano para elaborar o conservar alimentos y agua", concluyó el consejero.
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